Actualizado el 06/07/2023

Cómo presentarse a una entrevista

Si enviaste tu hoja de vida a varias empresas y tuviste la suerte de ser seleccionado para un entrevista personal, debes de tener en cuenta cómo debes de presentarte ese día para terminar de “vender”. la idea al reclutador de que eres la persona idónea para el puesto. Deberás de demostrar que eres la persona que tu cv dice que eres y convencer al entrevistador para que logres el éxito.

Antes de la entrevista es conveniente que investigues todo lo que puedas de la compañía a la que estás postulando. Ensaya las preguntas que crees que te puedan hacer y las respuestas que creas convenientes. Destaca tus cualidades pero sin llegar a la soberbia. Prepara el discurso que convencerá al reclutador de que eres el mejor candidato para el puesto.

Una vez preparadas tus preguntas y respuestas, es hora de decidir qué es lo que te pondrás ese día. Solo hay una sola oportunidad para causar una buena impresión y es necesario que según el puesto, elijas la vestimenta que creas vaya mejor con él o con la empresa (según lo que hayas investigado sobre ella) pero sin dejar de lado tu comodidad. No pierdas la naturalidad ni dejes de ser tú mismo, de otro modo se notará en la entrevista. Si no estás seguro, consulta con alguien de confianza. No te puedes permitir ir a una entrevista de trabajo con la ropa mal combinada.

Tampoco debes de dejar pasar las reglas de oro para causar una buena impresión: aseo personal impecable, es decir, pelo limpio y arreglado, si eres hombre deberás tener la barba y el bigote recortados y si eres mujer llevar un maquillaje sobrio que te favorezca. Y para ambos, no llevar un perfume que maree al entrevistador, es decir, muy fuerte. La ropa limpia y bien planchada, las uñas cortas, los zapatos brillantes, etc. Si vas a llevar accesorios que sean los mínimos. En estos casos menos es más.

Ahora pasemos al momento esperado, la hora de la entrevista. Es recomendable que llegues unos minutos antes. Cuando entres a la oficina, saluda amablemente, siéntate cuando te lo pidan y habla cuando él te empiece a preguntar. Recuerda sentarte con la espalda recta y cómoda. No estires las piernas ni te sientes al borde de la silla, no es bien visto.

Intenta asentir o negar con la cabeza según lo que él diga porque así demostrarás atención e interés en lo que él está diciendo. No hagas muy largas tus respuestas pero tampoco digas “sí”. o “no”. sin dar un porqué. Utiliza un lenguaje sencillo sin palabras rebuscadas, es decir exprésate naturalmente recordando que estás hablando con la persona que te podría aceptar en tu siguiente trabajo.

Deja que sea el entrevistador quien lleve la conversación y cuida el tono de tu voz así como la vocalización. No divagues mucho, no gesticules demasiado ni cruces los brazos ni las piernas porque eso denota incomodidad y desconfianza. Sonríe lo necesario, siempre mirando a los ojos y de manera sincera. Cuando la entrevista termine, despídete con confianza y amabilidad consultando cómo y cuándo te darán la respuesta.

Esperamos que estos consejos te ayuden a prepararte de la manera más apropiada para tu siguiente entrevista laboral. Mucha suerte.

Image courtesy of »Ambro» / FreeDigitalPhotos.net

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